miércoles, 10 de noviembre de 2010

Muertos en Centro penitenciario de Ilobasco

Al menos 16 personas murieron y 22 resultaron heridas consecuencia de un incendio que se desató en la mañana de este miércoles en una cárcel juvenil de El Salvador. Autoridades informaron que el desastre pudo haber sido provocado por un cortocircuito y que la cifra de fallecidos podría aumentar.

"Acudimos a la emergencia y hemos podido ver 16 muertos. Los 22 lesionados iban con quemaduras graves y ya están recibiendo atención médica", dijo el socorrista de la Asociación Comandos de Salvamento de El Salvador, Carlos Fuentes.

Los reos heridos que fueron trasladados en ambulancias hasta el Hospital Nacional Rosales, el más grande centro de atención medica del país, ubicado en San Salvador (capital), presentaban quemaduras en diferentes partes del cuerpo, señaló.

Entre tanto, la vocera de la oficina de comunicaciones de la Policía de El Salvador, Violeta Polanco declaró que "debemos decir que con base a una inspección preliminar en el centro de readaptación, el comisionado Mauricio Ramírez reporta 16 muertos, aunque la cifra podría variar".

Indicó que "la cifra de fallecidos puede alcanzar a los 22 internos".

El vocero de la Cruz Roja salvadoreña, Carlos López Mendoza, explicó que "las primeras informaciones que tenemos son que se trató de un accidente, un cortocircuito, y se dio el incendió, pero ya fue controlado, están investigando''.

Organismos internacionales habían criticado el pasado mes de octubre las condiciones "deplorables" e "insalubres" de los recintos penitenciarios en El Salvador.

El incendio en el Centro de Readaptación de Menores de Ilobasco, 75 kilómetros al noreste de San Salvador, se inició hacia las 06H00 locales (12H00 GMT), según una portavoz de la Policía Nacional Civil.

El Centro de Readaptación de Ilobasco es un penal "intermedio" donde cumplen sus penas presos juveniles que han cumplido recientemente 18 años de edad.

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“Ningún pueblo de América Latina es débil, porque forma parte de una familia de doscientos millones de hermanos que padecen las mismas miserias, albergan los mismos sentimientos, tienen el mismo enemigo, sueñan todos un mismo mejor destino y cuentan con la solidaridad de todos los hombres y mujeres honrados del mundo entero.” (Segunda declaración de la Habana)


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